El almacenamiento es otra consideración importante. «Una isla bien diseñada puede aumentar significativamente el espacio de almacenamiento disponible», explica Gail. Muchas islas integran electrodomésticos en un lado de la isla, mientras dejan el otro lado abierto para almacenamiento o como hueco para sentarse. «A menudo dejo una serie poco profunda de unidades sin tiradores en el lado visible de la isla», continúa Gail, «para que la apariencia siga siendo estilizada y al mismo tiempo proporcione almacenamiento adicional para cosas como vasos, jarras, tazones y jarrones».
Las islas también pueden ser un espacio brillante para que la gente se reúna de forma informal. En su propia cocina, Gail prefiere una isla grande y ha instalado cómodos taburetes para que toda la familia se reúna a comer. «Se siente más relajado y sociable que sentarse a una mesa», dice. En una cocina pequeña, puede que no haya suficiente espacio para agregar asientos a una isla, pero una mesa delgada con un estante para almacenamiento debajo puede ser una excelente solución.
Es posible que tengas la tentación de mantener el diseño de la isla muy similar al de los gabinetes circundantes, pero esta puede ser una oportunidad para ser más divertido. “Prefiero darle a una isla un tratamiento diferente al resto de la cocina para ahorrar tener hectáreas de la misma superficie”, afirma Rita Konig. «También puedes optar por tener una isla más alta que tus mostradores para que su uso sea más cómodo». Gail está de acuerdo: «A menudo elijo para la isla un color tonal diferente al del resto de los muebles de cocina para darle a la isla su propio elemento visual», dice. ‘Si la isla es lo suficientemente grande, combino también dos acabados para las encimeras. Si hay suficiente espacio para un voladizo para subir los taburetes de la barra, usaré una encimera diferente a la de la parte principal de la isla, combinando madera con laminado o piedra con acero inoxidable, por ejemplo.’
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‘Los diseñadores de cocinas te dirán que dejes al menos 120 cm entre la isla y los muebles altos, pero puedes reducirlo a 85 cm, aunque es cierto que dificulta que dos personas trabajen al mismo tiempo. No olvides agregar puntos de poder. Me gusta ponerlos dentro de los armarios o en el interior de los estantes abiertos. Cuando se trata de iluminación, lo mejor es evitar el enfoque habitual de dejar caer lámparas colgantes desde el techo, ya que las islas a menudo se colocan junto a las mesas de comedor, que pueden tener su propia lámpara colgante arriba. Para evitar este tipo de conflictos, a veces utilizo en su lugar un par de pequeños downlights empotrados.’ -Brandon Schubert

